INTRODUCCIÓN
⌅Entre los siglos XV y XVII el romancero vivió su momento de esplendor. Los romances se transmitían mediante la tradición oral de generación en generación a lo largo de los territorios de España y Portugal, tanto en Europa como en América. Al mismo tiempo se difundían mediante la imprenta a través de colecciones en pliegos sueltos, cancioneros y romanceros de enorme éxito editorial. Y estos textos impresos a menudo se volcaban de nuevo en la oralidad, mediante lecturas e interpretaciones ante grupos de personas, facilitando en algunos casos que se memorizasen y pasaran a la tradición. Los romances, así pues, constituían un repertorio común de historias y personajes para gran parte de la sociedad. Formaban parte del imaginario colectivo.
Las literaturas española y portuguesa de los siglos XV, XVI y XVII están profundamente influidas por el romancero. Numerosas obras de teatro de dramaturgos como Lope de Vega, Guillén de Castro o Luis Vélez de Guevara fueron inspiradas directamente en los ciclos de romances más populares. Capítulos enteros del Quijote, como el del descenso a la Cueva de Montesinos o el del retablo de Maese Pedro, toman como punto de partida las historias relatadas en el romancero tradicional. Pero además de esta influencia a gran escala, que afecta a los elementos estructurales de las obras literarias, encontramos también una frecuente utilización del romancero como recurso retórico. En prácticamente todos los géneros proliferan las referencias a romances, bien sea mediante alusiones a sus personajes o historias, bien mediante la cita textual de sus versos. En la poesía de Luís de Camões, Francisco de Quevedo, Luis de Góngora, entre muchos otros, se intercalan versos romancísticos para crear efectos cómicos o anagógicos. En el teatro de los principales dramaturgos, desde Gil Vicente hasta Calderón de la Barca, pasando por los autores citados anteriormente y muchos más —Rojas Zorrilla, Cubillo de Aragón, Ruiz de Alarcón, Antonio de Zamora—, se ponen en boca de personajes versos de romances con la certeza de que enseguida serán reconocidos por el auditorio. En la novela, el diálogo, la historiografía e incluso en los libros de léxico, gramática y retórica se recuerdan también estos versos con los más diversos propósitos.
Consciente del valor de estos testimonios, Carolina Michaëlis de Vasconcelos publicó Estudos sobre o Romanceiro Peninsular. Romances velhos em Portugal. En este trabajo aparecido originalmente en la Revista de Cultura Española entre 1907 y 1908, la investigadora estudió y contextualizó alrededor de 300 referencias a romances en la literatura portuguesa de los siglos XV, XVI y XVII, que le sirvieron, además, para extraer importantes conclusiones sobre la asimilación del romancero antiguo en Portugal y el papel que ha tenido este país en su transmisión y recreación pluriseculares. Sus conclusiones fueron revisadas y ampliadas tiempo después por Giuseppe Di Stefano (1982Di Stefano, Giuseppe (1982): “Il romancero viejo in Portugallo nei secoli xv-xvii (Rileggendo C. Michaëlis de Vasconcelos)”, Quaderni Portughesi, 11-12, pp. 27-37.) y Teresa Araújo (2014Araújo, Teresa (2014): “A alusão a romances nas letras portuguesas dos séculos xv-xvii”, Arbor. Ciencia, pensamiento y cultura, 190:766, pp. 1-11.) con sendos estudios sobre la función y el significado de las alusiones romancísticas en la literatura portuguesa. Recientemente, el corpus de referencias romancísticas de Vasconcelos ha sido catalogado, ampliado y actualizado por el proyecto Revisões literárias: a aplicação criativa de romances velhos (RELIT-RomRELIT-Rom: Revisões literárias: a aplicação criativa de romances velhos (sécs.XV-XVIII) [en línea], Lisboa, Instituto de Estudos de Literatura e Tradição (NOVA FCSH), disponible en: https://relitrom.pt/ [Fecha de consulta: 28/05/2023].) mediante una base de datos digital que se puede consultar en la dirección: https://relitrom.pt.
Siguiendo los pasos de Vasconcelos, María Goyri, con la colaboración de Ramón Menéndez Pidal, inventarió alrededor de 1500 referencias a romances en la literatura española de los siglos XV, XVI y XVII. Este inventario no fue concebido como una obra publicable, sino como una herramienta de trabajo: las fichas que lo conforman están dispersas a lo largo de las diferentes carpetas temáticas del Archivo del Romancero de la Fundación Ramón Menéndez Pidal, junto a los testimonios de las versiones antiguas, transcripciones de las versiones recopiladas en la tradición oral moderna, anotaciones histórico-literarias y diversos estudios, con el objetivo de que estos materiales sirvieran para investigaciones de conjunto sobre los romances. El inventario, de hecho, no se queda en el año 1700 —ese es el límite del actual proyecto de investigación para catalogar y estudiar sus fondos—, sino que continúa con cientos de citas y alusiones en los siglos XVIII, XIX y XX e incluso registra decenas de referencias en otras lenguas, principalmente en francés, inglés y latín. Se puede afirmar, sin ninguna duda, que toda referencia a romances detectada por María Goyri a través de sus numerosísimas lecturas era inmediatamente registrada. El mérito, desde luego, es grande, pues lo hacía en una época en la que no existía la posibilidad de hacer búsquedas automáticas en internet. El proyecto The Golden Age of the Romancero: Echoes of Traditional Ballads in Medieval and Early Modern Spanish Literature (GOLDEN-RomGOLDEN-Rom: The Golden Age of the Romancero: Echoes of Traditional Ballads in Medieval and Early Modern Spanish Literature, [en línea], Lisboa - Madrid, Instituto de Estudos de Literatura e Tradição (NOVA FCSH) - Fundación Ramón Menéndez Pidal, disponible en: https://goldenrom.eu [Fecha de consulta: 31/05/2023].) recientemente ha realizado la catalogación, edición y actualización de estos materiales para darlos a conocer al público mediante una base de datos del mismo modo que el proyecto RELIT-RomRELIT-Rom: Revisões literárias: a aplicação criativa de romances velhos (sécs.XV-XVIII) [en línea], Lisboa, Instituto de Estudos de Literatura e Tradição (NOVA FCSH), disponible en: https://relitrom.pt/ [Fecha de consulta: 28/05/2023]. ha hecho con la colección portuguesa. Está disponible en línea en la dirección: https://goldenrom.eu.
Además de los inventarios de Carolina Michaëlis de Vasconcelos y María Goyri, desde principios de la década de 1980 hasta la actualidad se ha ido afianzando con bastante fuerza una línea de investigación que analiza mediante estudios de caso la influencia del romancero en la literatura de los siglos XV, XVI y XVII. Por lo general estos trabajos examinan la presencia del romancero en un autor, una obra o un subgénero literario concreto o bien las referencias a un romance determinado en la literatura del periodo. Respecto a la parte portuguesa, contamos con los estudios de Aida Fernanda Dias (1974Dias, Aida Fernanda (1974): “Motos, vilancetes, cantigas e romances glosados”, Revista de História Literária de Portugal, 3, pp. 203-263., 1978Dias, Aida Fernanda (1978): O Cancioneiro Geral e a poesia Peninsular de Quatrocentos. Contactos e Sobrevivência, Coimbra, Livraria Almedina.), Pere Ferré (1982-1983Ferré, Pere (1982-1983): “El romance Él reguñir, yo regañar en el Auto de la Sibila Casandra”, Revista Lusitana, 3, pp. 55-67., 2003Ferré, Pere (2003): “Breves notas sobre el teatro de Anrique da Mota y Gil Vicente”, en Maria Leonor Machado de Sousa (coord.), Em Louvor da Linguagem. Homenagem a Maria Leonor Carvalhão Buescu, Lisboa, Colibri, pp. 97-109.), Teresa Araújo (2004aAraújo, Teresa (2004a): “O sentido de algumas evocações vicentinas a romances velhos”, en Teresa Araújo (coord.), Portugal e Espanha: Diálogos e Reflexos Literários, Faro - Lisboa, Centro de Estudos Linguísticos e Literários - Instituto de Estudos sobre o Romanceiro Velho e Tradicional, pp. 11-65., 2004bAraújo, Teresa (2004b): “Memórias literárias portuguesas de romances sobre a perda de Alhama”, en Teresa Araújo (coord.), Portugal e Espanha: Diálogos e Reflexos Literários, Faro - Lisboa, Centro de Estudos Linguísticos e Literários - Instituto de Estudos sobre o Romanceiro Velho e Tradicional, pp. 67-91, 2015Araújo, Teresa (2015): “Compor com romances no Cancioneiro Geral”, en Pere Ferré, Pedro M. Piñero y Ana Valenciano (coords.), Miscelánea de estudios sobre el romancero. Homenaje a Giuseppe Di Stefano, Sevilla - Faro, Universidad de Sevilla - CIAC - Universidade do Algarve, pp. 37-53., 2019Araújo, Teresa (2019): “‘Pues que a Portugal partís’: fórmulas romancísticas en movimiento”, en Isabella Tomassetti (coord.), Avatares y perspectivas del medievalismo ibérico, San Millán de la Cogolla, Cilengua, pp. 63-71.), Ricardo Filipe Afonso Mangerona (2020Mangerona, Ricardo Filípe Afonso (2020): O Romanceiro no Teatro Quinhentista: A Tragédia do Marquês de Mantua de Baltazar Dias, um caso de hipertextualidade, tesis de mestrado, Lyon - Lisboa, Université Mumière-Lyon 2 - Universidade Nova de Lisboa.), Matteo Pupillo (2020Pupillo, Matteo (2020): “Las mil caras” de “La bella malmaridada” nos autores do teatro portugûes do século XVI, tesis de mestrado, Lisboa, Universidade Nova de Lisboa.) y Ana Sirgado (2022Sirgado, Ana (2022): “Romances e provérbios na literatura portuguesa quinhentista: o caso de ‘erros por amores’“, Boletín de Literatura Oral, vol. extra. n.º 5, pp. 57-67., 2023Sirgado, Ana (2023): “Romances no teatro de Jorge Pinto, o ‘cantar ninguém no enjeita’“, Abenámar: Cuadernos de la Fundación Ramón Menéndez Pidal, 6, pp. 163-173.). Respecto a la parte española, contamos con los trabajos de Paloma Díaz-Mas (1993Díaz-Mas, Paloma (1993): “Algo más sobre romances (y canciones) en ensaladas”, Nueva Revista de Filología Hispánica, 41:1, pp. 231-250., 2013Díaz-Mas, Paloma (2013): “Lecturas y reescrituras de romances en los Siglos de Oro: glosas, deshechas y otros paratextos”, Edad de oro, 32, pp. 155-175.), Blanca Periñán (1979Periñán, Blanca (1979): Poeta Ludens: disparate, perqué y chiste en los siglos XVI y XVII, Pisa, Giardini Editori.) y Giuliana Piacentini (1984Piacentini, Giuliana (1984): “Romances en ensaladas y géneros afines”, El Crotalón, 1, pp. 1135-1173.) (y ambas juntas en Piacentini y Periñán, 2002Piacentini, Giuliana y Blanca Periñán (2002): Glosas de romances viejos. Siglo XVI, Pisa, Edizioni ETS.), Magdalena Altamirano (1997Altamirano, Magdalena (1997): “El romancero en la primera parte del Quijote”, Nueva Revista de Filología Hispánica, 45:2, pp. 321-336., 2007Altamirano, Magdalena (2007): “El romancero en la segunda parte del Quijote”, en Beatriz Mariscal y María Teresa Miaja de la Peña (coords.), Las dos orillas. Actas delXV Congreso de la Asociación Internacional de Hispanistas. Monterrey, México, del 19 al 24 de julio de 2004, Ciudad de México, Fondo de Cultura Económica, vol. 1, pp. 467-478., 2020Altamirano, Magdalena (2020): Cervantes y Avellaneda. La poesía interpolada. El romancero, Madrid - Frankfurt am Main, Iberoamericana - Vervuert.), Julio Alonso Asenjo (2002Alonso Asenjo, Julio (2002): “Quijote y romances. Uso y funciones”, Tirant: Bulletí informatiu i bibliogràfic, 5.), Emma Nishida (2004Nishida, Emma (2004): “La utilización de romances viejos en El Quijote por parte de algunos de sus personajes como forma comparativa y descriptiva”, en Alicia Villar Lecumberri (ed.), Peregrinamente peregrinos. Actas delV Congreso Internacional de la Asociación de Cervantistas. Lisboa. Fundação Calouste Gulbenkian. 1-5 septiembre 2003, [Alcalá de Henares], Asociación de Cervantistas, vol. 2, pp. 1575-1590., 2005Nishida, Emma (2005): “Aproximación al episodio del retablo de Maese Pedro (Quijote, II, 26) a través del romancero”, en Carlos Mata y Miguel Zugasti (eds.), Actas delcongreso “El Siglo de Oro en el nuevo milenio”, Pamplona, Eunsa, vol. 2, pp. 1265-1272., 2008Nishida, Emma (2008): “Los romances y el lenguaje de germanía en el Entremés del 'Rufián viudo': ¿Mensajes pícaros de Cervantes hacia Alonso Fernández de Avellaneda?”, en Alexia Dotras Bravo (coord.), Tus obras los rincones de la tierra descubren. Actas delVI Congreso Internacional de la Asociación de Cervantistas, [Alcalá de Henares], Asociación de Cervantistas - Centro de Estudios Cervantinos, pp. 591-599., 2013Nishida, Emma (2013): “Los romances viejos y nuevos en el Quijote de Alonso Fernández de Avellaneda (1614)”, en Alain Bègue y Emma Herrán Alonso (eds.), Pictavia Aurea. Actas delIX Congreso de la Asociación Internacional “Siglo de Oro”, Toulouse, Anejos de Criticón - Presses universitaires du Midi, pp. 579-585.), Daniele Crivellari (2008Crivellari, Daniele (2008): Il romance spagnolo in scena. Strategie di riscrittura nel teatro di Luis Vélez de Guevara, Roma, Carocci., 2011Crivellari, Daniele (2011): “Posibilidades de desbordamiento espacial en la comedia: Luis Vélez de Guevara, entre romances y romancero”, en Antonio Azaustre Galiana y Santiago Fernández Mosquera (coords.), Compostella aurea. Actas delVIII Congreso de la Asociación Internacional del Siglo de Oro (AISO), Santiago de Compostela, 7-11 de julio de 2008, Santiago, Universidade de Santiago de Compostela, pp. 993-1002.), Beatriz Mariscal Hay (2009Mariscal Hay, Beatriz (2009): “Gaiferos y su caballo. Avatares de un romance, del Quijote a la tradición oral moderna”, Nueva Revista de Filología Hispánica, 57:1, pp. 221-230.), Jesús David Jerez-Gómez (2013Jerez-Gómez, Jesús David (2013): “Carlomagno y Cervantes: Representación del romancero carolingio en el Quijote y su marco cultural mediterráneo”, en Alain Bègue y Emma Herrán Alonso (eds.), Pictavia Aurea. Actas delIX Congreso de la Asociación Internacional “Siglo de Oro”, Toulouse, Anejos de Criticón - Presses universitaires du Midi, pp. 469-475.), Mónica Valenti Moreno (2021Valenti Moreno, Mónica (2021): “El romancero sobre las tablas: El Prisionero en el teatro de los Siglos de Oro“, Abenámar: Cuadernos de la Fundación Ramón Menéndez Pidal, 4, pp. 69-91.) y Nicolás Asensio Jiménez (2022Asensio Jiménez, Nicolás (2022): “‘Con la grande polvareda’: el romance de La pérdida de don Beltrán en el Siglo de Oro”, Revista de Cancioneros, impresos y manuscritos, 11, pp. 1-54., 2023Asensio Jiménez, Nicolás (2023): “‘Ojos que nos vieron ir’: los romances de Durandarte, Belerma y Montesinos en el Siglo de Oro”, Abenámar: Cuadernos de la Fundación Ramón Menéndez Pidal, 6, pp. 96-109., en prensa aAsensio Jiménez, Nicolás (en prensa a): “Ecos de romances en las literaturas española y portuguesa (siglos XVI-XVII): el caso de El cautiverio de Guarinos”, Boletín de la Real Academias Española.).
A pesar de estos avances, debido a que hasta el momento los investigadores no tenían fácil acceso a la colección de María Goyri y Ramón Menéndez Pidal, no se ha realizado ningún estudio de conjunto sobre la alusión a romances en la literatura española. Este mismo asunto en la literatura portuguesa desde hace tiempo está muy avanzado, gracias a las investigaciones ya mencionadas de Vasconcelos (1907-1909Vasconcelos, Carolina Michaëlis de (1907-1909): Estudos sobre o romanceiro peninsular. Romances velhos em Portugal, Madrid, Revista “Cultura Española”.), Di Stefano (1982Di Stefano, Giuseppe (1982): “Il romancero viejo in Portugallo nei secoli xv-xvii (Rileggendo C. Michaëlis de Vasconcelos)”, Quaderni Portughesi, 11-12, pp. 27-37.), Araújo (2014Araújo, Teresa (2014): “A alusão a romances nas letras portuguesas dos séculos xv-xvii”, Arbor. Ciencia, pensamiento y cultura, 190:766, pp. 1-11.) y el proyecto RELIT-RomRELIT-Rom: Revisões literárias: a aplicação criativa de romances velhos (sécs.XV-XVIII) [en línea], Lisboa, Instituto de Estudos de Literatura e Tradição (NOVA FCSH), disponible en: https://relitrom.pt/ [Fecha de consulta: 28/05/2023].. Con la intención de contribuir a paliar esta laguna, mediante este artículo nos proponemos realizar una primera aproximación al fenómeno de la alusión a romances en la literatura española durante los siglos XV, XVI y XVII a través del análisis cuantitativo de la colección de María Goyri y Ramón Menéndez Pidal catalogada por el proyecto GOLDEN-RomGOLDEN-Rom: The Golden Age of the Romancero: Echoes of Traditional Ballads in Medieval and Early Modern Spanish Literature, [en línea], Lisboa - Madrid, Instituto de Estudos de Literatura e Tradição (NOVA FCSH) - Fundación Ramón Menéndez Pidal, disponible en: https://goldenrom.eu [Fecha de consulta: 31/05/2023]..
A través del recuento estadístico y la descripción de datos y frecuencias mediante tablas, histogramas y gráficos de sectores, se pretende determinar los siguientes factores: i) en cuanto a datos generales: cantidad de citas y alusiones identificadas, además del número de autores, obras literarias, romances y versos catalogados, ii) arco temporal del corpus y distribución de escritores con referencias a romances por épocas, iii) autores con mayor número de citas y alusiones, iv) géneros literarios con mayor y menor presencia del romancero, v) obras literarias con referencias romancísticas, vi) distribución de las citas y alusiones según las principales categorías temáticas, vii) respecto a los romances, se señalarán los más recordados, se consignará el porcentaje de romances que también tienen citas en la literatura portuguesa y se detallará finalmente cuántos tienen pervivencia en la tradición oral moderna, viii) respecto a los versos, se identificarán los más populares, se detallará la frecuencia de alusión según las partes del romance —íncipit, principio, intermedio, final— y se consignarán los porcentajes de reelaboración, ix) finalmente se detallará cuál es la función de las referencias en el nuevo contexto literario, en concreto si tienen función paródica.
Dado el amplio volumen de datos manejado y los límites de extensión de este artículo, las tablas relativas al número de alusiones por escritores, obras, romances y versos son una selección de los 25 con mayor frecuencia y para el cálculo de porcentajes se redondea a dos decimales. Para consultar los datos estadísticos completos, remitimos al documento de trabajo en Excel, que contiene toda la información en bruto y está disponible en el repositorio virtual Zenodo dentro de la comunidad del proyecto GOLDEN-Rom: https://zenodo.org/communities/golden-rom/.
ANTECEDENTES EN EL ANÁLISIS ESTADÍSTICO DEL ROMANCERO
⌅Esta no es la primera vez que se aplica una metodología estadística al estudio del romancero. La precursora fue también quien inició el estudio sistemático de las citas y alusiones en la literatura, Carolina Michaëlis de Vasconcelos. En las conclusiones de Estudos sobre o Romanceiro Peninsular. Romances velhos em Portugal (1907-1909Pupillo, Matteo (2020): “Las mil caras” de “La bella malmaridada” nos autores do teatro portugûes do século XVI, tesis de mestrado, Lisboa, Universidade Nova de Lisboa.: 329-335) realizó una completa descripción de los datos presentados en su colección en un epígrafe titulado “Estadística”: entre otros factores, dividió el corpus analizado según las épocas establecidas por la historiografía literaria, dio una completa relación de autores que se hacen eco del romancero, considerando, además, las variables de su cronología, condición social y adscripción a un movimiento literario determinado, detalló los géneros y subgéneros literarios con referencias romancísticas, registró la tipología (primitivos, tradicionales, juglarescos, artísticos) y la temática de los romances citados y aludidos y estableció una correlación entre versos de romances y refranes. Sin embargo, su análisis tiene un problema fundamental y es que Vasconcelos no llega a dar cifras exactas, ni siquiera con los datos más generales del corpus: “De cerca de cinquenta autores portugueses, tirei uns duzentos passos documentais, relativos a mais de oitenta romances que, com poucas excepções, subsistem em colecções antigas, espanholas” (Vasconcelos, 1907-1909Vasconcelos, Carolina Michaëlis de (1907-1909): Estudos sobre o romanceiro peninsular. Romances velhos em Portugal, Madrid, Revista “Cultura Española”.: 285). Para la descripción de los datos recurre a términos imprecisos como “muitos”, “bastantes” o “poucos”: “Quanto à índole, muitos são realmente primitivos, e tradicionais. Outros são jogralescos; outros, artísticos antigos” (Vasconcelos, 1907-1909Vasconcelos, Carolina Michaëlis de (1907-1909): Estudos sobre o romanceiro peninsular. Romances velhos em Portugal, Madrid, Revista “Cultura Española”.: 286). Parece, además, que en algún caso estaba equivocada: “Quase sempre é o hemistíquio primeiro, pelo qual o romance é recordado” (Vasconcelos, 1907-1909Vasconcelos, Carolina Michaëlis de (1907-1909): Estudos sobre o romanceiro peninsular. Romances velhos em Portugal, Madrid, Revista “Cultura Española”.: 288), una afirmación posteriormente discutida por Di Stefano (1982Di Stefano, Giuseppe (1982): “Il romancero viejo in Portugallo nei secoli xv-xvii (Rileggendo C. Michaëlis de Vasconcelos)”, Quaderni Portughesi, 11-12, pp. 27-37.: 31-32) y Araújo (2014Araújo, Teresa (2014): “A alusão a romances nas letras portuguesas dos séculos xv-xvii”, Arbor. Ciencia, pensamiento y cultura, 190:766, pp. 1-11.: 4), quienes señalaron que las partes del romance más recordadas en la literatura portuguesa son las intermedias.
En un artículo de 1982, integrado posteriormente en Arte poética del romancero oral, Diego Catalán (1997GOLDEN-Rom: The Golden Age of the Romancero: Echoes of Traditional Ballads in Medieval and Early Modern Spanish Literature, [en línea], Lisboa - Madrid, Instituto de Estudos de Literatura e Tradição (NOVA FCSH) - Fundación Ramón Menéndez Pidal, disponible en: https://goldenrom.eu [Fecha de consulta: 31/05/2023].: 73-77) advertía sobre la necesidad de “acudir a los estudios cuantitativos” para abrir una nueva etapa en las investigaciones sobre el romancero. En sus propias palabras, “todo intento de definir la poesía tradicional o de describir la variación debe basarse en observaciones respaldadas por datos estadísticos demostrativos y no tan sólo en ejemplos ilustrativos”. Catalán mencionaba varios precursores de este método. Así, Braulio do Nascimento (1964Nascimento, Braulio do (1964): “Processos de variação do romance”, Revista Brasileira de Folclore, 4, pp. 59-125.) había estudiado la variación de El veneno de Moriana (IGR 0172)1
A las publicaciones mencionadas por Catalán, habría que sumar el estudio cuantitativo sobre las fórmulas del romancero viejo de Ruth House Webber (1951Webber, Ruth House (1951): Formulistic diction in the Spanish ballad, Berkeley/Los Angeles, University of California Press.), tema retomado posteriormente por Maria Teresa Cáceres Lorenzo (2000Cáceres Lorenzo, Maria Teresa (2000): “Datos de la estructura formulística de los romances tradicionales modernos”, Lexis, 24:2, pp. 355-371.) aplicándolo a la tradición canaria. Asimismo, en 2022, en el tercer seminario digital del proyecto RELIT-RomRELIT-Rom: Revisões literárias: a aplicação criativa de romances velhos (sécs.XV-XVIII) [en línea], Lisboa, Instituto de Estudos de Literatura e Tradição (NOVA FCSH), disponible en: https://relitrom.pt/ [Fecha de consulta: 28/05/2023]., Teresa Araújo y Ana Sirgado ofrecieron algunos datos estadísticos del corpus de referencias a romances en la literatura portuguesa. Aunque el análisis cuantitativo no era el objetivo principal de su intervención, mostraron ciertos gráficos sobre la distribución de citas y alusiones por épocas o la frecuencia con la que se citan y aluden las principales categorías de romances.
Cabe recordar en este contexto las palabras de Diego Catalán (1982Catalán, Diego (1982): “Hacia una poética del romancero oral moderno”, en Eugenio de Bustos Tovar (dir.), Actas delCuarto Congreso de la Asociación Internacional de Hispanistas: celebrado enSalamanca, agosto de 1971, Salamanca, Asociación Internacional de Hispanistas - Consejo General de Castilla y León - Universidad de Salamanca, pp. 283-295.: 289), pues, a pesar del tiempo que ha transcurrido, siguen siendo aplicables hoy por hoy:
Lo hecho hasta aquí es aún poco. Pero bastante para convencernos de que los estudios estadísticos, con su objetividad matemática, representan un camino nuevo, de posibilidades extraordinarias, para penetrar en la esencia de la poesía oral, para llegar un día a describir la Poética de la poesía de creación colectiva. Creo, pues, que ha llegado el momento de intentar abordar estos trabajos aprovechándose de técnicas nuevas.
LIMITACIONES DE ESTA INVESTIGACIÓN
⌅Antes de pasar al examen de los resultados del análisis estadístico, conviene tener en cuenta ciertas limitaciones importantes de este estudio.
El corpus de citas y alusiones estudiado fue reunido a través de las lecturas de María Goyri, Ramón Menéndez Pidal y, en menor medida, colaboradores posteriores de la Cátedra-Seminario Menéndez Pidal de la Universidad Complutense de Madrid y la Fundación Ramón Menéndez Pidal en una época en la que no había herramientas digitales que pudieran facilitar la labor de forma automatizada. Por tanto, aunque el corpus sea grande y represente una selección fidedigna de las referencias a romances en la literatura española de los siglos XV, XVI y XVII, las conclusiones no pueden ser, huelga decir, definitivas porque no se abarca la totalidad de la materia estudiada. En una siguiente fase, se realizarán ampliaciones mediante el rastreo en bases de datos y buscadores digitales, principalmente CORDECORDE = Corpus diacrónico del español [en línea], Madrid, Real Academia Española , disponible en: http://corpus.rae.es/cordenet.html [Fecha de consulta: 31/05/2023]. y Google.
El análisis estadístico se ha realizado sobre las citas y alusiones de las siguientes secciones del Archivo del Romancero de la Fundación Ramón Menéndez Pidal: a) romances épicos e históricos de referente hispánico, b) romances carolingios, c) romances ariostescos, artúricos y amadisíacos, d) romances bíblicos, e) romances clásicos y f) romances trovadorescos. Sin embargo, faltan por incorporar las referencias romancísticas que pueda haber en dos secciones del Archivo que todavía no han sido catalogadas y digitalizadas: g) romances de tema folklórico —amor fiel, esposa desdichada, mujeres matadoras, raptos, cautivos, entre otros— y h) romances religiosos. En una siguiente fase, se revisarán manualmente estos fondos para comprobar si María Goyri, Ramón Menéndez Pidal e investigadores posteriores incorporaron también citas y alusiones.
El presente estudio se debe entender, por tanto, como una primera aproximación a la materia. Los datos se irán actualizando a medida que se produzcan avances significativos en las siguientes fases, por lo que las estadísticas podrán variar. Para paliar este inconveniente, se prevé la publicación de adendas a este artículo en el futuro.
ANÁLISIS ESTADÍSTICO
⌅Datos generales
⌅La colección de citas y alusiones a romances en la literatura española de los siglos XV, XVI y XVII de María Goyri y Ramón Menéndez Pidal abarca un total de 1468 referencias. Concretamente, 1350 son citas textuales de versos, mientras que 118 son alusiones generales a personajes e historias de los principales ciclos temáticos o alusiones específicas a los sucesos relatados en un romance. Estas referencias se producen en un total de 500 obras literarias pertenecientes a 174 autores identificados más la categoría de anónimos. Son 256 romances los que se citan o aluden en este corpus y un total de 648 versos. Se trata, por tanto, de un corpus verdaderamente amplio y lo suficientemente representativo para hacer una primera aproximación al fenómeno de la alusión a romances en la literatura española de los siglos XV, XVI y XVII.
Respecto a la autoría de las identificaciones, según la letra de los documentos, María Goyri es la responsable del 60 % —correspondiente a 890 referencias—, mientras que Menéndez Pidal lo es del 19 % —285 referencias—. El resto se divide entre un 16 % de citas y alusiones identificadas por personal posterior de la Fundación Ramón Menéndez Pidal y un 4 % de identificaciones atribuibles en conjunto a María Goyri y Ramón Menéndez Pidal, pues proceden de documentos repetidos con la letra de ambos en los que es difícil saber quién identificó en primer lugar la referencia.
Arco temporal
⌅El autor más temprano en aludir a romances fue Diego Martínez de Medina, también conocido como Diego de Sevilla (1376-1446). La referencia se incluye en un poema compilado en el Cancionero de Herberay des Essarts, de entre 1462 y 1465, que comienza “Por una selva de amores” y que lleva la rúbrica de “Glosa del Romance de por aquela Sierra muy alta que fizo diego de Seuilla”. Como ha advertido Virginie Dumanoir (2016Dumanoir, Virginie (2016): “Hacia un invenatrio de fuentes manuscritas antiguas del Romancero: fuentes y cronología para los primeros romances”, eHumanista, 32, pp. 269-287.: 279), a pesar de lo que indica el título, no se trata estrictamente de una glosa, sino más bien de una contrafactura. De hecho, en este caso concreto, los límites entre contrafactura, glosa, cita o alusión no son nada precisos. El tema original es La fuga del rey Marsín (IGR 0568) el conocido romance carolingio sobre la batalla de Roncesvalles. El poema de Diego de Sevilla sigue la forma métrica de romance, utiliza la misma asonancia en -í y evoca tres hemistiquios: “Por una selva de amores” remite a “Por las sierras de Altamira”, mientras que “Reniego de ti, Amor, / y de cuanto te serví” parafrasea “Reniego de ti, Mahoma, / y de cuanto te serví”.
El último autor del corpus con fechas de nacimiento y muerte identificadas es el dramaturgo posbarroco Pedro Francisco Lanini y Sagredo (1640-1715). En la comedia de La batalla de las Navas y el rey don Alfonso el Bueno, impresa en 1675, incluyó una cita de Cuando de Francia partimos (IGR 0039), una adaptación del romance tradicional de La pérdida de don Beltrán (IGR 0150), cuyo verso “con la grande polvareda, / perdimos a don Beltrán” se hizo proverbial. Sin embargo, esta no es la última obra del siglo XVII con referencias a romances ni tampoco se puede afirmar que sea el último autor de la época que utiliza este recurso. Hay numerosas obras publicadas o compiladas a finales de siglo; hay otras obras probablemente escritas en las postrimerías del XVII, pero cuyos testimonios impresos y manuscritos pertenecen a la primera mitad del XVIII; hay también autores de los cuales no conocemos datos del nacimiento y muerte, pero cuya producción parece situarse a caballo entre ambos siglos, como José Trejo y Varona. Este último incluyó una cita de “Helo, helo por do viene”, procedente del romance cidiano El rey moro que reta a Valencia (IGR 0045), en el poema Juizio de Paris, desde las Bodas de Peleo y Thetis donde tuuo su origen, escrito en los últimos años del siglo XVII (Bègue, 2010Bègue, Alain (2010): “Juicio de Paris desde las bodas de Peleo y Tetis, de José Trejo Varona: estudio y edición de una fábula mitológica burlesca de las postrimerías del siglo xvii”, Lectura y signo, 5, pp. 277-319.).
En cuanto a la distribución de autores por épocas, se observa lo siguiente: Las referencias a romances se inician tímidamente en la primera mitad del siglo XV con dos escritores de este periodo, que representan un 1,44 %. A partir de entonces crece el porcentaje: primero de forma progresiva, con 11 autores en la segunda mitad del XV, que suponen un 6,32 %; después, de forma algo más abrupta, con el importante número de 37 autores en la primera mitad del XVI, alcanzando el 21,17 %. El punto álgido se produce en la segunda mitad del XVI con 57 autores que abarcan el 32,66 %. La primera mitad del XVII, está prácticamente igualada con el tramo anterior, con 53 autores, que equivalen al 30,65 %. Finalmente, en la segunda mitad del XVII se produce un descenso, de ritmo más pausado que el crecimiento inicial, con 14 autores, que suponen un 7,76 %. En definitiva, la mayoría de los escritores que citan y aluden a romances se sitúa, por tanto, entre la segunda mitad del siglo XVI y la primera mitad del XVII, siendo, concretamente, el 63,31 %. A la luz de estos datos se puede concluir que la edad dorada de las citas y alusiones a romances fue precisamente durante el Siglo de Oro de la literatura española.
Autores
⌅Dejando al margen la categoría de obras anónimas —la cual supone un 19,14 % del corpus con 281 referencias—, el autor que hace mayor uso del romancero es, con muchísima diferencia, Lope de Vega: se registran 217 referencias, lo cual constituye un 14,77 % del total. Estas cifras tan altas no solo se explican por su vasto conocimiento del romancero, sino también por su enorme producción literaria, que le llevó a ser el escritor más prolífico del Siglo de Oro. Abarca tres veces y media más que el autor que ocupa la segunda posición, Miguel de Cervantes, con 64 referencias que representan un 4,36 %. En tercer lugar, con 48 referencias y un porcentaje del 3,27 %, se sitúan empatados Francisco de Quevedo y Gonzalo Correas. En el tramo comprendido entre el 2 y 2,6 % se encuentran Sebastián de Covarrubias, Benito Carrasco, Luis Quiñones de Benavente, Joaquín Romero de Cepeda y Tirso de Molina con entre 38 y 30 referencias. Finalmente, con más de una veintena de referencias, se sitúan en la franja del 1,43 % y el 1,91 % Luis de Aranda, Gabriel de Sarabia, Luis de Milán, Pedro Calderón de la Barca, Agustín Moreto, Vicente Suárez de Deza y Luis Vélez de Guevara.
En relación con la cuestión de género, cabe destacar que de un total de 174 autores identificados solo tres son mujeres: María de Zayas, Catalina Clara Ramírez de Guzmán y Ana Caro de Mallén. La autoría femenina en las obras que contienen referencias a romances representa un 1,72 %. En cuanto al fenómeno de la alusión a romances, la cifra y el porcentaje se reduce todavía más: dejando fuera las citas y alusiones anónimas, solo hay 3 referencias de autoría femenina frente 1184 de autores masculinos, representando un 0,25 % del total. Huelga decir que tal diferencia no se debe a un mayor o menor conocimiento del romancero según el género, sino a las dificultades de acceso de la mujer al mundo intelectual durante los siglos XV, XVI y XVII y el consecuente —y abrumador— menor número de autoras que de autores en la literatura de este periodo.
Géneros literarios
⌅El teatro es el género literario con mayor cantidad de citas y alusiones a romances, con un total de 530, lo cual equivale al 36,1 % del corpus. De estas, 128 corresponden a subgéneros del teatro breve, como, entremeses, loas, bailes, jácaras o mojigangas, representando un 24 %, mientras que en el teatro mayor se producen 402 referencias, que suponen el 76 %. En segundo lugar, se encuentra el género poético con un total de 497 citas y alusiones, que equivalen al 33,9 % del corpus. Finalmente, la prosa abarca el 30 % general con un total de 441 referencias repartidas entre los más diversos subgéneros.
Dentro de este último grupo, donde más citas y alusiones se producen es en la prosa de no ficción, especialmente en los diccionarios y refraneros (89 referencias, 20,18 %) y la historiografía (69 referencias, 15,65 %), seguidos por el subgénero epistolar (27 referencias, 6,35 %), los tratados de gramática, retórica y estilo (23 referencias, 5,22 %) y, más de lejos, por los tratados morales o filosóficos (7 referencias, 1,59 %), tratados musicales (5 referencias, 1,13 %), libros de viajes (4 referencias, 0,91 %), autobiografías (3 referencias, 0,68 %), textos geográficos (3 referencias, 0,68 %), tratados religiosos (3 referencias, 0,68 %), sermones religiosos (2 referencias, 0,45 %) y textos jurídicos (1 referencia, 0,23 %). En cuanto a la prosa de ficción, se sitúan en los primeros lugares la novela moderna —principalmente el Quijote— (60 referencias, 13,61 %), el diálogo (51 referencias, 11,56 %) y la novela picaresca (43 referencias, 9,75 %) y les siguen la novela corta (13 referencias, 2,95 %), el discurso (12 referencias, 2,72 %), la narrativa breve tipo cuentos, dichos y sentencias (12 referencias, 2,72 %), para acabar, finalmente, con la novela de caballerías (5 referencias, 1,13 %), la novela pastoril (2 referencias, 0,45 %) y la fábula (1 referencia, 0,23 %).
Obras literarias
⌅El ranking de las 10 obras con mayor número de referencias a romances lo encabeza la Ensalada de muchos romances viejos y cantarcillos, un poema anónimo conservado en un pliego suelto de la primera mitad del siglo XVI de la Biblioteca Nacional de la República Checa (signatura 9.H.231). Contiene un total de 50 citas de romances. Le sigue, muy de cerca, el Vocabulario de refranes y frases proverbiales y otras fórmulas comunes de la lengua castellana de Gonzalo de Correas. En este tratado paremiológico de 1627 se compilan 48 citas de versos de romances. La tercera posición la ocupa, con un total de 41 referencias, el Entremés de los romances, obra compuesta entre 1593 y 1602, de autoría muy discutida. El Tesoro de la lengua castellana o española de Sebastián de Covarrubias, publicado en 1611, se sitúa en cuarto lugar con 38 referencias. Con más de una treintena de citas y alusiones, están La vida del estudiante pobre, diligente e industrioso, la compilación de poemas de Francisco de Quevedo El parnaso español de 1648, la Tragicomedia del Marqués de Mantua de Lope de Vega, el poema Nueva Guerra de Joaquín Romero de Cepeda y la Segunda parte del ingenioso caballero don Quijote de La Mancha. Finalmente, el décimo lugar lo ocupa, con 28 referencias, la Glosa peregrina de Luis de Aranda.
Se debe tener en cuenta que cuatro de las diez obras con más referencias a romances se adscriben a los géneros poéticos de ensaladas, disparates y glosas: Ensalada de muchos romances viejos y cantarcillos, La vida del estudiante pobre, diligente e industrioso, Nueva Guerra y Glosa peregrina. Este tipo de composiciones se caracteriza por citar en los últimos versos de cada una de las estrofas dos hemistiquios octosilábicos de romances, canciones de la lírica popular u otros poemas muy conocidos en el momento. Se establece un juego intertextual entre lo narrado en los primeros versos y el cierre, a menudo cómico, que proporcionan los versos de la composición citada. Estas obras literarias acumulan una gran cantidad de citas de romances en un espacio muy pequeño. Abarcan, concretamente, el 39,17 % de referencias en el ranking de las 10 obras con mayor número de citas y alusiones. Si sumamos el resto de textos adscritos a estos géneros poéticos —Disparates de Gabriel de Sarabia (24 referencias), Coplas que se hallaron Puestas en las Puertas del Palacio de Lisboa (14), Carta notabilissima del serenissimo rey Amet Maluco (19), Dido engañada (16), Ensalada de San Miguel (9), A la caída de Valenzuela de Juan de Tassis (5), Chiste nuevo de Francisco de Argüello (4), Disparates de Montoro (2), Ensaladas de Flecha (2), Ansaladilla (1)—, solo estas catorce obras suman un total de 237 referencias, lo cual representa el 16,14 % del corpus.
Categorías temáticas de los romances
⌅Respecto a la distribución de las citas y alusiones según la categoría temática de los romances, el 52,38 % —un total de 769 referencias— pertenecen a temas épicos e históricos de referente hispánico. Siguiendo la clasificación del Archivo del Romancero de la Fundación Ramón Menéndez Pidal, en este gran grupo se incluyen romances sobre Bernardo del Carpio, Fernán González, los Infantes de Lara, El Cid, temas histórico-legendarios hasta el fin de la dinastía leonesa, temas histórico-legendarios de Fernando I a Sancho IV, romances noticieros o de tema histórico anterior a los Trastámara, del tiempo de los Trastámara y del tiempo de los Reyes Católicos, además de romances moriscos, romances noticieros del tiempo de los Austrias y romances sobre la conquista de América. Se trata del conjunto más numeroso, con muchísima diferencia, pues tiene un total de 179 romances con citas y alusiones, un número cuatro veces mayor que el segundo grupo, el carolingio, con 41 romances con referencias. Dentro de este, como puede observarse en el documento completo de estadísticas, los más recordados son los romances del Cid con 291 referencias, seguidos por los romances moriscos con 125 y los romances noticieros de la época de los Trastámara con 115.
En segundo lugar, con el 34,36 % del total —concretamente 503 referencias—, se sitúa el conjunto de romances carolingios, los cuales, como su nombre indica, tratan de historias relativas a la épica francesa, muchos de ellos sobre personajes y hechos relacionados con la corte de Carlomagno o sus descendientes. El subgrupo más numeroso, con 114 referencias, son los romances de Conde Claros. Le siguen los romances sobre el Marqués de Mantua con 93 referencias, los romances sobre Gaiferos con 78, los de Durandarte, Belerma y Montesinos con 61, los de Roncesvalles con 59, los de Gaiferos y Galván con 51, otros romances juglarescos con 23, romances sobre Valdovinos con 14 y romances derivados de otras canciones de gesta con 10.
El resto de las citas y alusiones se reparte entre romances clásicos con 87 referencias, que equivalen casi a un 6 %, trovadorescos con 53 referencias y el 3,6 %, artúricos con 50 referencias y el 3,4 % y ariostecos y amadisíacos con 6 referencias y el 0,4 %. No haya ninguna referencia registrada de romances bíblicos.
Romances más citados
⌅El ranking de romances más citados lo encabeza Conde Claros preso (IGR 0366) con 92 referencias que representan un 6,27 % del corpus. Le sigue, bastante de cerca, el Marqués de Mantua (IGR 0088), con 75 referencias que equivalen al 5,11 %2
A pesar del alto número de referencias, no todos los romances de esta lista fueron enteramente populares. Los romances de los cuales conservamos citas de varios versos o de partes diferentes no suponen un problema, pues queda patente que —a pesar de la inevitable prevalencia de unos versos o unas partes determinadas— el romance era conocido más o menos por entero. Sin embargo, algunos romances solo son recordados por un único verso o por una parte concreta. Entre los diez más citados, ocurre con Mira Nero de Tarpeya y El cautiverio de Guarinos. El primero, siendo un romance de casi medio centenar de versos de dieciséis sílabas, solo es recordado por los cuatro hemistiquios iniciales: “Mira Nero de Tarpeya / a Roma cómo se ardía. // Gritos dan niños y viejos / y él de nada se dolía”; del segundo, con casi cien versos dieciseisílabos, solo se recuerdan los seis primeros hemistiquios: “¡Mala la vistes, franceses, / la caza de Roncesvalles! // Don Carlos perdió la honra, / murieron los doce pares, // cativaron a Guarinos, / almirante de las mares” (Asensio Jiménez, en prensa aAsensio Jiménez, Nicolás (en prensa a): “Ecos de romances en las literaturas española y portuguesa (siglos XVI-XVII): el caso de El cautiverio de Guarinos”, Boletín de la Real Academias Española.). Más evidente resulta, si avanzamos en la lista, con Cuando de Francia partimos, del cual solo se cita el verso: “con la grande polvareda, / perdimos a don Beltrán” (Asensio Jiménez, 2022Asensio Jiménez, Nicolás (2022): “‘Con la grande polvareda’: el romance de La pérdida de don Beltrán en el Siglo de Oro”, Revista de Cancioneros, impresos y manuscritos, 11, pp. 1-54.). En estos casos se puede afirmar que el verso o dicha parte en concreto, en efecto, era popular, pero es más cuestionable si el resto del romance era realmente conocido.
Los diez romances más citados y aludidos en la literatura española tienen también referencias en la literatura portuguesa, tal y como queda patente en la base de datos RELIT-RomRELIT-Rom: Revisões literárias: a aplicação criativa de romances velhos (sécs.XV-XVIII) [en línea], Lisboa, Instituto de Estudos de Literatura e Tradição (NOVA FCSH), disponible en: https://relitrom.pt/ [Fecha de consulta: 28/05/2023].. Si se incluye todo el listado, con un total de 24 romances, se observa que el 70,83 % —todos salvo De Mantua salen apriesa (IGR 0843), Sale la estrella de Venus (IGR 0097), Pérdida de Antequera y escaramuza de Alcalá (IGR 0011), Muerte de don Alonso de Aguilar (IGR 0064), Fátima y Jarifa (IGR 0014), Entre los sueltos caballos (IGR 1942) y Lanzarote y el ciervo de pie blanco (IGR 0535)— también tiene citas en Portugal. No obstante, si se amplía la comparación a la colección entera, el porcentaje se reduce considerablemente: solo 49 de los 256 romances, es decir, un 19,1 % está presente en ambas literaturas. El dato, en cualquier caso, no es concluyente. La base de datos RELIT-RomRELIT-Rom: Revisões literárias: a aplicação criativa de romances velhos (sécs.XV-XVIII) [en línea], Lisboa, Instituto de Estudos de Literatura e Tradição (NOVA FCSH), disponible en: https://relitrom.pt/ [Fecha de consulta: 28/05/2023]. registra un total de 74 romances con citas y alusiones en la literatura portuguesa, mientras que para esta comparativa solo se han tenido en cuenta 49. Como se ha detallado anteriormente, el motivo radica en que faltan por incorporar a la base de datos GOLDEN-RomGOLDEN-Rom: The Golden Age of the Romancero: Echoes of Traditional Ballads in Medieval and Early Modern Spanish Literature, [en línea], Lisboa - Madrid, Instituto de Estudos de Literatura e Tradição (NOVA FCSH) - Fundación Ramón Menéndez Pidal, disponible en: https://goldenrom.eu [Fecha de consulta: 31/05/2023]. dos importantes secciones —romances de tema folklórico y romances religiosos— del Archivo del Romancero que no han sido catalogadas y digitalizadas hasta el momento y que seguramente, tal y como ocurre con la literatura portuguesa, contengan citas y alusiones a romances en las letras españolas. Se debe tener en cuenta, asimismo, que en la colección de María Goyri y Ramón Menéndez Pidal, aunque de forma poco significativa, se incorporan asimismo romances nuevos y artificiosos que alcanzaron cierta popularidad, mientras que en la colección de Vasconcelos, ampliada por el proyecto RELIT-RomRELIT-Rom: Revisões literárias: a aplicação criativa de romances velhos (sécs.XV-XVIII) [en línea], Lisboa, Instituto de Estudos de Literatura e Tradição (NOVA FCSH), disponible en: https://relitrom.pt/ [Fecha de consulta: 28/05/2023]., lo que priman son temas viejos, juglarescos y trovadorescos, sin hacer demasiadas calas en romances cultos creados a partir del siglo XVI. Este factor podría influir también en la desproporción.
De los diez romances más citados y aludidos en los siglos XV, XVI y XVII, el 80 % ha tenido pervivencia en la tradición oral moderna. Tan solo de Mira Nero de Tarpeya y Lanzarote y el orgulloso no se han recogido testimonios orales en los siglos XIX, XX y XXI3
Versos más citados
⌅El verso más recordado es “en figura de romeros / no nos conozca Galván” del romance de Gaiferos y Galván, con 40 referencias que hacen un 2,43 % del total. Le sigue bastante de cerca “Mira Nero de Tarpeya / a Roma cómo se ardía”, del romance homónimo, con 36 referencias, que suponen un 2,19 %. La tercera posición es para “La mañana de San Juan / al tiempo que alboreaba”, la fórmula con la que se inician los romances de Fátima y Jarifa y Pérdida de Antequera y escaramuza de Alcalá.
Con más de una veintena de referencias y menos de una treintena, entre la franja del 1,34 % y el 1,77 %, se sitúan los versos “Helo, helo, por do viene / el moro por la calçada” de El rey moro que reta a Valencia, “que los yerros por amores / dignos son de perdonar” de Conde Claros preso, “gritos dan niños y viejos / y él de nada se dolía”, que es la segunda parte de Mira Nero de Tarpeya, “mensajero eres, amigo, / no mereces culpa, no” de El conde Fernán González llamado a cortes, “Media noche era por filo / los gallos querían cantar”, fórmula compartida por Gaiferos libera a Melisenda (IGR 0151), Gaiferos sale de cautividad (IGR 0828) y Conde Claros preso y “ojos que nos vieron ir / nunca nos verán en Francia” de Durandarte envía su corazón a Belerma.
Con entre 11 y 20 referencias, entre la franja del 0,67 % y el 1,22 %, se posicionan los versos “más envidia he de vos, conde, / que mancilla ni pesar” de Conde Claros preso, “Mala la vistes, franceses, / la caça de Roncesvalles” de El cautiverio de Guarinos, “Mis arreos son las armas / mi descanso el pelear” del romance homónimo, “Cata Francia, Montesinos, / cata París la ciudad” de Montesinos mata a Tomillas, “como fuera Lançarote / cuando de Bretaña vino” de Lanzarote y el orgulloso, “Afuera, afuera, Rodrigo / el sobervio castellano” del romance cidiano homónimo, “con la mucha polvareda / perdimos a don Beltrán” de Cuando de Francia partimos, “de una parte la cerca el Duero / de otra Peña Tajada” de las Quejas de doña Urraca, “¿Dónde estás, señora mía, / que no te duele mi mal?” del Marqués de Mantua, “Por aquel postigo viejo / que nunca fuera cerrado” del Entierro de Fernandarias (IGR 0034), “Conde Claros con amores / no podía reposar” de Conde Claros preso, “Digasme tú, el hermitaño, / tú que haces santa vida” de Lanzarote y el ciervo de pie blanco, “todos duermen en Zamora, / mas no duerme Arias Gonçalo” de Tristes van los zamoranos (IGR 0275) y “Cavalleros de Moclín, / peones de Colomera” (IGR 0810), “Rey don Sancho, rey don Sancho / no digas que no te aviso”, “Sale la estrella de Venus / al punto que el sol se pone” de los romances homónimos.
Un poco más de la mitad de los versos registrados en el anterior listado, 13 de 25, lo que supone el 52 %, están incluidos en el Vocabulario de refranes y frases proverbiales y otras fórmulas comunes de la lengua castellana de Gonzalo Correas. Esto significa que, de tan populares, gran parte de estos versos se acabaron disgregando del romance para adquirir una vida propia en forma de paremia, aplicándose a diferentes contextos. Algunos, por el contrario, hicieron el camino inverso. Como ya señaló Carolina Michaëlis de Vasconcelos (1907-1909Vasconcelos, Carolina Michaëlis de (1907-1909): Estudos sobre o romanceiro peninsular. Romances velhos em Portugal, Madrid, Revista “Cultura Española”.: 290), es probable que ciertos versos de romances fueran en realidad refranes que existían previamente. Del listado, siguiendo a la investigadora alemana-portuguesa, tal parece ser el caso de “que los yerros por amores / dignos son de perdonar —verso proverbial estudiado por Ana Sirgado (2022Sirgado, Ana (2022): “Romances e provérbios na literatura portuguesa quinhentista: o caso de ‘erros por amores’“, Boletín de Literatura Oral, vol. extra. n.º 5, pp. 57-67.)—”, “mensajero eres, amigo, / no mereces culpa no” y “Ojos que nos vieron ir” con la segunda parte como “nunca nos verán volver”, que se documenta desde el siglo XIV (Asensio Jiménez, 2023Asensio Jiménez, Nicolás (2023): “‘Ojos que nos vieron ir’: los romances de Durandarte, Belerma y Montesinos en el Siglo de Oro”, Abenámar: Cuadernos de la Fundación Ramón Menéndez Pidal, 6, pp. 96-109.).
El íncipit es, con diferencia, la parte más citada del romance: aparece en 623 ocasiones, que representan un 44,2 % del total. Le siguen, con 372 citas y un 26,4 % del total, las partes intermedias del romance, entendiendo estas partes como las situadas entre los dos cuartos interiores del texto. A continuación, muy igualado, con 340 citas y un 24,1 % del total, se sitúan los versos del principio, que son los del primer cuarto del romance. Los versos del final, entendiendo este como el último cuarto del texto, se citan en 70 ocasiones, que representan un 5 %. En mucha menor medida se citan estribillos y paratextos (3 ocurrencias, 0,21 %) y el romance completo (1 ocurrencia, 0,07 %). También hay 51 citas de partes no identificadas, por tratarse, generalmente, de romances sin testimonios antiguos, por lo que no se puede constatar con seguridad si se trata de un íncipit, un verso del principio, del intermedio o del final. Los resultados contrastan con las citas de romances en la literatura portuguesa, pues Giuseppe Di Stefano (1982Di Stefano, Giuseppe (1982): “Il romancero viejo in Portugallo nei secoli xv-xvii (Rileggendo C. Michaëlis de Vasconcelos)”, Quaderni Portughesi, 11-12, pp. 27-37.: 32) y Teresa Araújo (2014Araújo, Teresa (2014): “A alusão a romances nas letras portuguesas dos séculos xv-xvii”, Arbor. Ciencia, pensamiento y cultura, 190:766, pp. 1-11.: 4), hicieron notar que las partes intermedias eran las más recordadas.
De los versos citados, el 56,59 % (concretamente 764) presenta algún tipo de reelaboración, frente a un 39,04 % (527) que se mantiene igual a alguno de los manuscritos e impresos antiguos donde se conserva el romance. Un 4,37 % (59) son versos que no se puede saber con certeza si fueron reelaborados, al no conservarse testimonios de los siglos XV, XVI y XVII para cotejarlos. La mayor parte de lecciones diferentes se realizan para adaptar el verso a su nuevo contexto literario. Los procesos más comunes son la introducción, supresión o cambio de elementos sintácticos y gramaticales para introducir el verso en una nueva oración, la paráfrasis del verso con el objetivo de crear un giro cómico y la reformulación métrica para adaptarlo a una nueva estructura poética. En raras ocasiones registran variantes propias de la tradición oral no documentadas por los testimonios antiguos (Asensio Jiménez, en prensa bAsensio Jiménez, Nicolás (en prensa b): “Testimonios indirectos para la edición del romancero: citas y alusiones en los siglos XV, XVI y XVII”, en José Manuel Lucía Megías (dir.), María Díez Yáñez, Gerardo Pérez Barcala y Amaranta Saguar García (eds.), Editar textos medievales en el siglo XXI, San Millán de la Cogolla, Cilengua.). Tal es el caso de una cita de Rey don Sancho, rey don Sancho (IGR 0330) en la Refundición de la crónica del Despensero de la segunda mitad del siglo XV: además de los primeros versos con variantes “rrey don ſancho rrey don / ſancho non digas que no lo digo / de la cibdad de camora [sic] / vn traydor era ſallido / es el fijo [sic]” se incorpora un verso no documentado: “ſy algun dano te viniere / el conçejo ſea qto” (Salamanca, Biblioteca de la Universidad: MSS/2309, fol. 13v).
Funcionalidad
⌅Por último, cabe destacar que un 62,60 % de las citas y alusiones, un total de 919, se hacen con un sentido cómico o paródico. La mayor parte de ellas se produce en el teatro, siendo 410 referencias romancísticas con sentido paródico de un total de 530, lo que equivale al 77,36 %. En poesía son 311 referencias con sentido paródico de un total de 497, lo cual supone un porcentaje algo más bajo, un 62,58 %. La prosa es, sin lugar a duda, el género más serio en cuanto a la utilización de versos de romances, pues solo 198 referencias de 441 tienen un sentido cómico, lo cual representa un 44,9 %.
CONCLUSIONES
⌅A lo largo de estas páginas se ha realizado una primera aproximación al fenómeno de la alusión a romances en la literatura española los siglos XV, XVI y XVII a través del análisis cuantitativo de la colección de citas y alusiones de María Goyri y Ramón Menéndez Pidal, ahora editada y catalogada por el proyecto GOLDEN-RomGOLDEN-Rom: The Golden Age of the Romancero: Echoes of Traditional Ballads in Medieval and Early Modern Spanish Literature, [en línea], Lisboa - Madrid, Instituto de Estudos de Literatura e Tradição (NOVA FCSH) - Fundación Ramón Menéndez Pidal, disponible en: https://goldenrom.eu [Fecha de consulta: 31/05/2023]..
Como se ha advertido desde el inicio, no puede entenderse como un estudio definitivo, ya que aún quedan por incorporar, si las hubiera, las citas y alusiones a romances de tema folklórico y religioso del Archivo del Romancero de la Fundación Ramón Menéndez Pidal y la colección es susceptible de ser aumentada con nuevas referencias a partir de búsquedas en internet. Sin embargo, las 1468 citas y alusiones a romances que se han tenido en cuenta para realizar esta investigación resultan ser un corpus verdaderamente amplio y representativo como para tener una idea inicial bastante precisa del fenómeno de la alusión a romances en la literatura española los siglos XV, XVI y XVII.
Entre otros factores, se ha determinado que la época culminante de este fenómeno es el periodo comprendido entre la segunda mitad del siglo XVI y la primera mitad del XVII, que el autor con más citas y alusiones a romances es Lope de Vega, que estas se distribuyen sin una desproporción evidente entre el teatro, la poesía y la prosa, que las obras con mayor número de referencias suelen ser las que se adscriben a los géneros poéticos de la ensalada, los disparates y la glosa, seguidas de los tratados paremiológicos y léxicos Vocabulario de refranes y frases proverbiales y Tesoro de la lengua castellana o española, que predominan los temas épicos e históricos de referente hispánico, que el romance de Conde Claros preso es el más popular y “en figura de romeros / no nos conzoca Galván” es el verso más recordado, que la mayoría de versos más citados se registran en la compilación de Correas y que la mayor parte de referencias, especialmente en el teatro, se utilizan con sentido cómico. Las estadísticas podrán variar en las futuras ampliaciones del corpus para determinados casos o en una escala pequeña, pero muy probablemente las conclusiones generales, por su magnitud, se mantendrán en porcentajes similares.
Como línea de investigación futura, resultaría interesante comparar el fenómeno de la alusión a romances entre España y Portugal para determinar si existen diferencias relevantes. Hasta el momento se han realizado estudios de caso que rastrean la presencia de determinados romances en ambas literaturas. Sin embargo, falta un análisis general, basado en la estadística, contrastando las colecciones de María Goyri y Ramón Menéndez Pidal y Carolina Michaëlis de Vasconcelos. Para ello será necesario, como ya se ha advertido, disponer de la catalogación de las citas y alusiones restantes del primero y disponer de un estudio estadístico del corpus portugués.
Esperamos, en definitiva, que este artículo pueda ser de utilidad a las investigaciones sobre el romancero y la literatura española de los siglos XV, XVI y XVII ofreciendo, por primera vez, un significativo conjunto de datos cuantitativos sobre el exitoso fenómeno de la alusión a romances.